Tiene 11 años y pinta como una profesional
Isabela Morales Rojas es una artista que con solo 11 años y un año de experiencia en la pintura ya realiza obras dignas de admiración no solo de su maestro y sus familiares, sino de todos los que conocen sus cuadros.
Isabela, en el taler Blanco y Negro. Foto: Camilo Suárez
Increíblemente, Isabela tiene 11 años y es difícil de creer porque al escucharla hablar es como conversar con un adulto y no con esta niña que comenzó a pintar hace un año inspirada en la pintora mexicana Frida Kahlo.
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Un alma antigua
Como un alma antigua, así la define su maestro Luis Hernández, ya que “cuando uno interactúa con ella es como si se hablara con una mujer adulta y no con una niña”, expresa este artista que actualmente es quien guía a Isabela en su aprendizaje sobre la acuarela y próximamente sobre el óleo.
A Isabela le gusta mucho leer, así fue como llegó a conocer más sobre la artista mexicana que la inspiró para comenzar a pintar, ya que uno de sus temas preferidos para las lecturas, es la historia.
“La pintura es una forma de expresarse, uno no tiene que hablar, solo pinta”, así entiende Isabela la pintura, la misma que usa para expresar “cómo me siento, lo que pienso o cómo interpreto las cosas”.
Foto: Camilo Suárez
Sin embargo, la pintura la ve como un hobby que va a realizar toda la vida, pues profesionalmente sueña con “estudiar egiptología porque se descubren muchas cosas y a mí me gusta investigar, descubrir cosas nuevas porque soy muy curiosa, por eso, tampoco no descarto la idea de ser investigadora”.
En el arte descubrió que se le da muy fácil pintar cielos, por eso los incluye en la mayoría de sus obras, y, como actualmente se encuentra perfeccionando sus técnicas para pintar animales, el agua ha sido otro elemento con el cual descubrió su facilidad para realizarlo.
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Isabela tiene la expectativa, como lo define ella misma, de algún día “poder tener mi propia exposición”, pues ya ha asistido a exposiciones de arte y le encanta este tipo de espacios.
Foto: Camilo Suárez
De las cosas que más le gusta de la pintura, es la libertad creativa que le permite “sentir felicidad y estar en este espacio que es un lugar para liberarme y conversar con las demás personas sobre temas que me interesan y no del nuevo cantante de reggaeton, sino de historia o técnicas de pintura o artistas”.
Aunque le gustan los niños, no se ve como profesora de arte porque “soy muy impaciente cuando no me entienden a la primera lo que explico”. Por esta razón, se queda mejor como pintora, ya que lo que más le gusta del arte es “que con simplemente pintar y dejar todo ahí, sin armar polémica ni nada, uno puede compartir su forma de ver el mundo”.
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Isabela solo pinta lo que le gusta, lo que la inspira a crear y lo que la hace sentir esa conexión tan fuerte con el arte, el cual define como “tranquilidad”.
Por: Andrés Bedoya
johanb@gente.com.co