Más de una década como sacerdote en Santa Gema
De Simijaca, un municipio del departamento de Cundinamarca, ubicado a 135 kilómetros de Bogotá, es proveniente Héctor Manuel Peña Lancheros, actual párroco de la Iglesia Santa Gema.
Iglesia Santa Gema. Foto Edwin Bustamante.
Este simijense pasó en aquel territorio bañado por el río Suárez toda su niñez y adolescencia. Pertenecía a una familia muy religiosa que acostumbraba asistir a la eucaristía los domingos y rezar el rosario juntos. Cuando a su colegio llegó la Congregación Pasionista, la inquietud de seguir un proceso vocacional con miras al sacerdocio le empezó a rondar la cabeza.
En 1985 se graduó del bachillerato e ingresó al Seminario San Gabriel, en Cajicá, “después estudié filosofía en la Universidad San Buenaventura, luego teología en la Pontificia Universidad Javeriana y posteriormente fui trasladado como sacerdote a Piedecuesta, Santanter”, explica el párroco.
Allí se dedicó a formar a los seminaristas que apenas estaban iniciando y tiempo después se fue para Roma, Italia, a hacer una especialización en teología dogmática en la Pontificia Universidad Gregoriana.
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Héctor Manuel Peña Lancheros, párroco de la Iglesia Santa Gema.
Durante tres años vivió en esta capital europea trabajando en diferentes pastorales. Lo que más resalta de esta experiencia fue haber conocido a compañeros de todo el mundo y haber tenido la oportunidad de predicar la eucaristía en otra lengua, algo que describe como novedoso y enriquecedor.
Por el año 2005 y tras volver a Bogotá, comenzó a colaborar con la Parroquia La Sagrada Pasión, pero en su destino estaba marcada la ciudad de Medellín, así que fue trasladado a la Parroquia Santa Gema, una de las más representativas de la Comuna 11, Laureles – Estadio.
“Hasta el año 2012 fui vicario de la iglesia y apoyé la pastoral juvenil, que en aquel entonces estaba compuesta por Encuentros de Promoción Juvenil y Jornadas de Vida Cristiana”, menciona este sacerdote, quien según la comunidad se ha caracterizado por llevarle el mensaje de Dios a los jóvenes de una forma auténtica y cercana.
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Gracias a su experiencia como profesor y capellán en varios colegios, asegura que el conflicto de los jóvenes no es tanto por la fe sino por la institución, sin embargo, no considera un reto hablarles de Dios, pues el proceso implica comprender la realidad de los jóvenes y sus problemáticas, para que de este modo sea más fácil transmitir la figura de Jesús como alguien cercano e indulgente.
Como parte de su misión de evangelizar ha visitado lugares como Chocó, los Llanos orientales, Santander y Boyacá, escenarios donde ha compartido con los más necesitados la buena nueva.
Desde el 2018 funge como párroco de Santa Gema y afirma que esta parroquia está abierta a todo el que quiera participar de las eucaristías y los sacramentos, “lo más importante es escuchar a la comunidad y todo el que venga se va a encontrar con unos sacerdotes dispuestos a comprender, ayudar y evangelizar”.
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Héctor Manuel Peña Lancheros, párroco de la Iglesia Santa Gema.
El padre Héctor, como varios feligreses suelen decirle, disfruta esa cercanía con la gente y principalmente ser un instrumento en las manos de Dios para la misericordia.
Por Michelle Acevedo Vélez
michellea@gente.com.co