
Consejos de un duro del mundo de las ventas
Gente conversó con Nicolás Mejía, gerente del Grupo Automontaña/Massymotors y nos contó cómo llegó a ser un gran empresario del sector automotriz.

Nicolás Mejía, gerente general del Grupo Automontaña/Massymotors. Foto: Carlos Velásquez.
Cuando se piensa en el mundo de las ventas suelen llegar a la mente imagenes de un campo competitivo y agreste. Un mundo en el que todo gira entorno a finanzas, inventarios, contabilidad y logística, y en el que no hay cabida para la pregunta por la emoción y el espíritu.
Este lugar común en el que caemos al imaginar el trabajo de un vendedor dista mucho de la visión que tiene Nicolás Mejía, gerente general del Grupo Automontaña/Massymotors, sobre su propia labor.
Mejía está está a la cabeza de una de las empresas más pujantes del sector automotriz en la ciudad, es la principal comercializadora de Mazda y mueve anualmente cerca de 300 mil millones de pesos en ventas, que se traducen a unos 3000 carros entre nuevos y usados. Hoy se siente orgulloso de la prosperidad que ha logrado, principalmente porque no fue así toda su vida.
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Lucha y superación
Nicolás creció en el seno de una familia envigadeña en la que era el mayor de 3 hermanos. Cursó la educación media en los colegios José María Berrío y Benedictinos de Santamaría, y como cualquiera de sus compañeros de clase, soñó con ser piloto o comunicador social, pero la vida le tenía preparado otro destino.
Cuando tenía 13 años una crisis económica golpeó duramente a su familia: “Cuando nos cortaron los servicios públicos, ese día entendí que tenía que hacer algo más que lamentarme, llorar o buscar culpables”, recuerda Nicolás.
Siendo aún un niño, empezó a trabajar en el centro de la ciudad como mensajero para Calzado Zulia. Durante los años siguientes estuvo trabajando mientras seguía con sus estudios; vendió discos en la Feria del Disco y fue vendedor independiente de perfumería, negocio con el cual pudo ayudar a pagar la carrera de administración de empresas en la Universidad Eafit.
“Tuve que alternar el estudio y el trabajo porque no tenía otra opción. Si no lo hacía en la casa no tendríamos para pagar los servicios públicos o para mercar. Desde niño siempre aprendí a navegar en fuertes tormentas”.
Esta experiencia, dice él, le ayudó a desarrollar una resiliencia y una sensibilidad frente a los demás. “Fue una oportunidad muy bonita para romper esa burbuja de cristal en la que yo vivía. En el centro empecé a convivir con personas espectaculares”, afirma el empresario.
Sus prácticas académicas las realizó en Finevesa, donde fue analista de crédito para vehículos. Esta experiencia le abrió las puertas de la financiera de Chevrolet en Medellín cuando apenas tenía 23 años. No tardaría en ser nombrado gerente de ventas en Andar, concesionario de Chevrolet, antes de ser nombrado gerente general del Grupo Automontaña hace 15 años.
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Filosofía del bien-estar
Las fuertes tormentas no estuvieron presentes sólo en sus tiempos como estudiante. Nicolás recuerda que cuando llego a la gerencia general de Automontaña, la compañía pasaba por momentos muy turbulentos.
“La empresa estaba en ley 1116, un momento económico muy difícil en el que muchas personas consideraban inviable la compañía, ahí entré yo a impregnar de optimismo al equipo de trabajo”, para Nicolás su rol como gerente general es contagiar confianza.
Se ha puesto la tarea de crear en Automontaña una cultura organizacional, un ecosistema en el que las personas puedan soñar, sentirse comprometidas y motivadas para sacar una empresa adelante, pues “muchas veces las crisis en las compañías, más que económicas, son emocionales”.
Paralelamente a su trabajo como empresario, Mejía ha dedicado los últimos años de su vida a la docencia universitaria en Eafit, donde imparte la materia de gerencia de ventas.
Durante estos años, también ha estado dando charlas a poblaciones vulneradas, llevando un mensaje académico, pero también de esperanza. “Tengo esa combinación de docente, emprendedor y empresario, empecé a dar charlas en comedores comunitarios, fundaciones, colegios”.
Esta faceta filantrópica que él le achaca a sus años como mensajero, hizo posible la creación de Conferencias Actívate, un espacio en redes sociales que a día de hoy cuenta con más de 200 conferencias con invitados nacionales e internacionales con las que busca enviar un mensaje de resiliencia a las personas que no hallan oportunidades para crecer en el ámbito personal y empresarial.
Nicolás también hace parte de la mesa directiva de Juguemos en el Bosque, una organización sin ánimo de lucro comprometida con la educación y formación niños, niñas y adolescentes a través de la recreación.
A parte del mundo de las ventas, a Nicolás le apasiona la lectura y compartir con su hijo, un pequeño de 10 años al que el llama su verdadero emprendimiento.
¿Qué se necesita para emprender?
Esta parte de Nicolás ha sabido influenciar su manera de administrar una empresa, para él lo primero es la gente pues “finalmente lo que uno ve afuera no es la carencia de preparación académica, hay una carencia de resiliencia disciplina, determinación, coraje… Esas características deben estar en cualquier empresario o emprendedor”.
La importancia que tiene para el empresario el fortalecimiento mental y emocional radica en que sólo con preparación académica no alcanza para lidiar con el fracaso o sortear problemas del día a día.
1) Si vas a emprende primero es contigo mismo
El emprendedor se debe preparar como persona. Es imposible sortear situaciones externas difíciles si internamente no tienes los elementos para hacerlo. Primero se es persona, luego se es empresario o emprendedor.
2) Cuida tu entorno personal y el de tu negocio
Consume contenidos que te inspiren, conversa con personas que te sumen. Cuando seleccionas personal, buscas que los candidatos tengan valores que combinen con los de la empresa. Lo mismo pasa con lo que dejas entrar en tu vida.
3) Agradece siempre
La gratitud es un importante estimulante emocional, es vital para mantener el espíritu, la energía y el optimismo necesarios para mejorar la productividad.
Por: Alejandro Puerta Calle
alejandropc@gente.com.co