Ruta de reciclaje en El Poblado está lejos de su meta
Hacemos un balance de Ruta Recicla, el programa de recolección de residuos aprovechables que cumplió 7 meses en El Poblado (Medellín).
Este es el mapa que a los vecinos de El Poblado no se les puede olvidar a partir de mañana: la #RutaRecicla
Mira tu barrio:
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Ruta Recicla, el programa de Empresas Varias para recolectar el material reutilizable que producen los 23 barrios de El Poblado junto con La Asomadera, está lejos de expandirse.
El proyecto piloto lanzado en noviembre del 2017, que visita una vez a la semana las zonas residenciales y de lunes a sábado a los sectores comerciales, ha encarado una serie de dificultades que retrasan su plan de expansión a otras comunas de la ciudad.
Desde vecinos que pretenden cobrarles a Empresas Varias por el material hasta dificultades con los recicladores tradicionales y una cuota diaria de 2 toneladas, frente a las 7 que se habían fijado inicialmente, han llevado a que Emvarias desestime el plan de ampliar Ruta Recicla a 4 comunas más en este segundo semestre.
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Así va la ruta
Catalina Hernández León, ingeniera ambiental y profesional del área de Gestión Operativa de Emvarias, indica que desde el pasado 20 de noviembre, cuando empezó a rodar la ruta, se han recolectado en promedio 2 toneladas de las más de 130 que se producen a diario en El Poblado.
Estas 2 toneladas distan de la meta de 7 que se fijó inicialmente Emvarias y que corresponden a más de un tercio de las que producen los 48.096 usuarios residenciales y 10.765 usuarios comerciales.
¿Por qué no se están captando? Hay varios inconvenientes. En primer lugar, “la mayoría de los usuarios tiene un chip según el cual ‘si yo reciclo, usted me tiene que pagar o tener un beneficio por eso’”, dijo Hernández.
Asociado con este fenómeno, los empleados de Emvarias han identificado que en la comuna 14 hay una presencia importante de grandes cadenas de mercado. “Hay muchos vehículos que llegan, se parquean en cierto punto y esperan que lleguen los trabajadores de oficios varios o los vigilantes con las tulas llenas de material, lo pesan y le pagan”, aseguró la ingeniera Hernández León.
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De otra parte, han encontrado resistencia de parte de algunos recicladores porque muchos asumen que el propósito de Ruta Recicla es quitarles su medio de sustento. La ingeniera, que ha trabajado con este sector vulnerable de la población, reconoce la aprensión, por lo que la instrucción que han dado a sus trabajadores es no atacar ni quitarle su material al reciclador. “Un material de un reciclador se puede identificar en cualquier parte porque está separado y acumulado mientras él consigue más y lo lleva a vender”, agregó.
Gracias a estas medidas, así como a los diálogos con los mismos recicladores, han tratado de acomodar las frecuencias de forma tal que no coincida con el día en el que se recogen los ordinarios, que es cuando llegan los recicladores.
Asimismo, han escuchado su petición para modificar los horarios de recolección de manera que dé más tiempo para hacer su aprovechamiento, pero en este punto Emvarias no ha podido llegar a un acuerdo con ellos. Las distancia entre Medellín y el relleno sanitario, así como el tráfico habitual en la ciudad, impiden que los camiones puedan hacer la microrruta, ir a La Pradera y volver en el tiempo estimado, y esto dificulta un acuerdo al respecto.
Estas dificultades, entre otras, llevaron a que Emvarias optara por fortalecer y mejorar algunos aspectos del proyecto antes de llevarlo a otros puntos de la ciudad. De acuerdo con Hernández, una vez aprendan del ejercicio con recicladores, informales y compraventeros, van “a mejorar muchos aspectos y fortalecer El Poblado”, concluyó.
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Por Álex Esteban Martínez
alexm@gente.com.co